El  „milagro“ de la auriculoterapia

(Autor: Michael Noack)

En los actos informativos no sólo se encuentra uno con personas confiadas. Voy a referir un caso: a un dentista relativamente joven le divierte  ponerlo todo en tela de juicio. Auqnue está tan seguro de su posición que tampoco tiene problemas en contestar generosamente a las preguntas que yo le hago. El hombre reconoce que sufre de continuos dolores en la columna cervical. ¡Una enfermedad profesional! Ya se sabe, un profesional siempre sometido a esa postura tan poco natural de los dentistas. Algo nada agradable, pero su traumatólogo lo va controlando con manipulaciones e inyecciones periódicas.
Lleva ya años con dolores. Yo le pregunto si se sometería  en presencia del público a un tratamiento de auriculoterapia.
Bueno –contesta- no se pierde nada en el intento. Un joven heróico e incrédulo se lanza al ruedo. Aplausos. Empeizo a colocar las agujas y al cabo de unos 5 minutos (no siempre la cosa va tan rápida) saco las agujas y doy por terminada la sesión. El hombre se levanta sonriente. El público está expectante.  En un primer momento nuestro hombre se muestra poco o nada impresionado.  Pero de pronto cambia su actitud. Estira los hombros, gira la cabeza, cada vez más fuerte, y reconoce, lleno de asombro, que por vez primera en años se encuentra absolutamente libre de dolor.

Es posible que este estado indoloro no se mantenga  así por mucho tiempo. Seguramente habrá que tratarle más veces.

Aunque el hecho es que este dolor latente desapareció de pronto. Y no sólo porque algo fue reprimido o substituído, sino porque tras el tratamiento el cuerpo dejó de necesitar (al menos temporalmente)  esa señal que es el dolor.
No la necesitaba, sencillamente. O sea, que el cuerpo es capaz de mucho más de lo que cabría esperar de él.

Siempre busqué una terapia sencilla, sin complicaciones, que pudiera ser aplicada en cualquier parte con el mayor éxito posible. Como Heilpraktiker en ejercicio  pensaba que,
por muy buen fitoterapeuta, homeópata o quiropráctico que uno sea, en casos de extrema urgencia, o cuando no estás totalmente seguro de que la substancia homeopática sea la indicada, o la solución la adecuada, era  importante contar con una terapia complementaria , que convenza al paciente por la inmediatez de su aplicación. Y si ésta además cuenta con una extraordinaria efectividad, no podría  ser mejor.
La auriculoterapia responde por completo a estas exigencias.

Conozco muchos jóvenes  Heilpraktiker, que necesitarán años para dominar cualquiera de las terapias fundamentales y que a partir de ese momento se pondrán a buscar alternativas. Yo suelo decirles: “Hay una terapia, es fácil de aprender, ofrece un sistema plausible y respuestas para cualquier dolencia,”. ¡LA AURICULOTERAPIA!


¿En qué consiste?


    * Se trata de una terapia relativamente joven. 
      El Dr. NOGIER, un médico francés de Lyon, fue el iniciador, en 1950, de este método de diagnóstico y tratamiento a través del pabellòn auricular. En 1956 lo presentó en un congreso. 
    * La auriculoterapia es una terapia independiente, que puede afrontae por sí sola gran cantidad de dolencias.
    * La auriculoterapia es un método sencillo e increíblemente  efectivo.

La auriculoterapia es un instrumento nuevo y eficaz del tratamiento del dolor.

      La auriculoterapia ha demostrado una enorme efectividad en el tratamiento de adicciones. Esto es especialmente  válido en el caso de la adicción al tabaco, el alcohol y la adiccion a la comida.

    * La particularidad del tratamiento a través de la oreja es, además de la complejidad de este concepto terapéutico, la inmediatez de su efecto.

Cuando se coloca una aguja de acupuntura en el pabellón auricular o se manipula un punto de cualquier otro modo, la señal desatada llega a través de una vía  extremadamente corta a la formación reticular, desde allí sigue hasta el cerebro, que la remite al correspondiente órgano de destino en el cuerpo. 

Mediante la estrategia iniciada por Nogier y que otros autores, como G. Lange siguieron desarrollando, logra un efecto a largo plazo, que en muchos casos se percibe con inmediatez.  

    * La auriculoterapia no es nociva, ni tiene efectos secundarios. Habida cuenta de un número cada vez mayor de personas que por causa de las alergias o por otras razones no pueden tomar medicamentos –o mantienen una actitud crítica  frente a la medicina convencional-  el tratamiento mediante la auriculoterapia puede constituir una efectiva alternativa de sanación.

* Gracias a la rapidez con que la auriculoterapia influye en las interacciones corporales, es muy adecuada  para la medicina de emergencia.  En casos en que el enfermo precise ayuda inmediata por un problema agudo, se convierte en un medio ideal para el alivio de dolores, la superación de traumas o la relajación en crisis agudas (por ejemplo, cólicos).


    * A través del oído podemos influir, aliviar e incluso eliminar por completo todo tipo de dolores. Las posibilidades de esta terapia van del dolor traumático –por ejemplo tras accidentes- a neuralgias, como los dolores de cabeza de toda condición y origen, la ciática,  el dolor fantasma, asó como los dolores que acompañan  a los ataques reumáticos,  la claudicación intermitente o el herpes zóster.

    * NOGIER ya recomendó la auriculoterapia para el tratamiento de todas las dolencias que afectan al sistema nervioso central. El miedo, la agorafobia, las obsesiones, la falta de concentración, el vértigo o el tartamudeo, son ejemplos de toda una serie de indicaciones, para las que se puede aplicar exitosamente la auriculoterapia. Su efecto relajante hace que sea especialmente efectiva en el tratamiento de las personas mayores. 

    * La auriculoterapia está especialmente indicada en el tratamiento de las adicciones 


Diferentes programas para superar el alcoholismo, la drogadicción y el abuso de medicamentos, para dejar de fumar o para combatir la obesidad por trastornos alimenticios dan al terapeuta la posibilidad de adaptarse a la situación individual de la persona adicta.
Por supuesto que la cuota de éxito dependerá de la experiencia del terapeuta. Aunque en cualquier caso es muy alta.
Hay incluso centros para drogadictos en Alemania y Estados Unidos que cuentan con programas de auriculoterapia como parte constitutiva de sus programas de ayuda.

    * La auriculoterapia sirve además para aliviar las alergias, el asma, así como la inflamación de órganos internos, desde los problemas pancreáticos a las colitis.

* La auriculoterapia no siempre está indicada. Lo importante es que el terapeuta sea capaz de valorar la situación individual del paciente. 

De la experiencia práctica sabemos que por ejemplo no tiene mucho sentido tratar a un paciente tras una comida opulenta (del paciente, se entiende).

También hay que ser cautos cuando encontramos una excesiva hipersensibilidad en la oreja del paciente, o en ciertos puntos.

En caso de hiperreacción  a un  estímulo terapéutico (también, claro está, en el plano psíquico) habría que tener también cuidado. Si la hiperreacción del paciente pone en tela de juicio el efecto terapéutico, más vale olvidarse de la auriculoterapia.

En el caso de pacientes que estén bajo los efectos de fuertes analgésicos o neurolépticos,también  es mejor evitar  la auriculoterapia, ya que ésta aumenta o transforma los efectos de los medicamentos. Por eso, si esperamos reacciones que no podemos controlar será mejor que actuemos de manera responsable y no recurramos a la auriculoterapia.

También hay que tener cuidado cuando se trata de enfermos graves. Mientras que el dolor sí puede tratarse en determinados casos, cuando encontramos casos graves de hipertonía, enfermedades coronarias o procesos cancerosos, es mejor no recurrir a la auriculoterapia. Por ello es la gravedad de la enfermedad la que determina el nivel de contraindicación.

En caso de embarazo el tratamiento a través de de la oreja también puede suponer un riesgo para el terapeuta inexperto. Al tratar a una embarazada, que por ejemplo está aquejada de dolores de espalda,  hay que evitar por todos los medios  todos aquellos puntos relacionados directa o indirectamente con el embarazo.

En caso de que a pesar de haber realizado un diagnóstico y tratamiento correctos no encontremos el efecto esperado, o incluso nos veamos confrontados con un empeoramiento del estado del enfermo, podemos hablar de impedimentos terapéuticos, que es importante superar en primer término. Para entender la naturaleza de estos impedimentos son de gran utilidad las enseñanzas de los hermanos HUNEKE (terapia neural):

    * Toda enfermedad crónica puede estar producida por un campo de interferencia
    * Cada punto del cuerpo puede convertirse en campo de interferencia.

Esto significa que cualquier cicatriz, cualquier fractura ósea soldada hace mucho tiempo, cualquier infección crónica (nos referimos a aquellos focos infecciosos que surgen en los dientes, las fosas nasales, las amígdalas , o los provocados por las vacunas),  pueden convertirse en un  campo de interferencia generando  irritaciones en el organismo. Los campos de interferencia provocan enfermedades, entre cuyas consecuencias cuentan también los dolores.

   
Además de las cicatrices y los focos locales, los bloqueos vertebrales también suelen dificultar el éxito terapéutico. El bloqueo de la primera costilla aparece con frecuencia como foco de interferencia. Y lo mismo ocurre con los problemas de lateralidad del paciente.

Y permítame que lo repita una vez más: Una terapia sólo puede ser buena, si quién la aplica la domina de verdad.

Esta terapia es sencilla, pero no tan simple como algunos creen. Sencilla no significa que sea la segunda opción. La auriculoterapia hay que aprenderla bien. Y una comprensión integral de la misma no es posible adquirirla en esos cursos de un solo día que se ofrecen por ahí.  Nuestra organización (AK- Ohrakupunktur) considera oportuno dedicar 6 días sólo para el aprendizaje básico de los fundamentos de la técnica.  A ello se suma la necesaria experiencia, para la que hace falta tiempo y tutorías.

 


Para cualquier pregunta sobre el tema diríjanse por favor a: info@ak-ohrakupunktur.de